Querido Justyce / Dear Justyce

Entre los mejores libros del año, según NPR. Llega la secuela del aclamado éxito de ventas, Querido Martin. Desde la cárcel, un adolescente escribe cartas a su amigo sobre su experiencia con el sistema de justicia juvenil.
-Por qué Justyce McAllister ha logrado entrar a Yale, pero su amigo de la infancia Vernell Laquan Banks ha terminado en la cárcel? Si los dos crecieron a una cuadra de distancia en el vecindario Wynwood Hieghts de la Atlanta sureña.
“-Cómo lo lograste?”, le pregunta Quan a Justyce, el joven protagonista de Querido Martin, en las cartas que le envía desde el Centro Regional de Detención Juvenil.
Además de sus mensajes al amigo, las viñetas y flashbacks de la vida de Quan muestran sus problemas en casa, los malentendidos en la escuela, la incomprensión. Todo lo que conduce a un encuentro con la policía, donde las cosas se salen de control. Un oficial muerto y un arma con sus huellas cambian el destino del joven. Ni siquiera él está seguro de cómo sucedieron las cosas.
ENGLISH DESCRIPTION
An NPR Best Book of the Year * The stunning sequel to the critically acclaimed, #1 New York Times bestseller Dear Martin. An incarcerated teen writes letters to his best friend about his experiences in the American juvenile justice system.
An unflinching look into the tragically flawed practices and silenced voices in the American juvenile justice system.
Vernell LaQuan Banks and Justyce McAllister grew up a block apart in the Southwest Atlanta neighborhood of Wynwood Heights. Years later, though, Justyce walks the illustrious halls of Yale University . . . and Quan sits behind bars at the Fulton Regional Youth Detention Center.
Through a series of flashbacks, vignettes, and letters to Justyce--the protagonist of Dear Martin--Quan's story takes form. Troubles at home and misunderstandings at school give rise to police encounters and tough decisions. But then there's a dead cop and a weapon with Quan's prints on it. What leads a bright kid down a road to a murder charge? Not even Quan is sure.

Nic Stone